Unarevista española publicó un duro texto sobre la violencia sexual y cómo tantolas víctimas y el resto de la sociedad permanecen calladas. 

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Enla última década y especialmente este 2017, los escándalos por violencia sexualhan aumentado, no solo en número de hechos ocurridos, sino en número de mujeresque decidieron contar sus experiencias pasadas.

Segúnla Organización Mundial de la Salud(OMS) “La violencia sexual abarca actos que van desde el acoso verbal a la penetraciónforzada y una variedad de tipos de coacción, desde la presión social y laintimidación a la fuerza física.”

Deacuerdo a datos de la Unicef  “Estudiosrecientes señalan otro dato preocupante: entre el 20 y el 40% de los abusos sexualesson cometidos por niños mayores, adolescentes y personas con menos de 21 años”.

Aprincipios de este mes, la revista española Código Nuevo, publicó una carta queintenta concientizar sobre este drama que aún viven victimas silenciosas entodo el mundo. En muchos casos, las iniciativas contra la violencia sexual ponen el foco en las víctimas: en cómo protegerse o en cuándo denunciar. Esta, en cambio, es diferente. Está dirigida directamente al los abusadores.

Entre el 20 y el 40% de los abusos sexuales son cometidos por niños mayores, adolescentes y personas con menos de 21 años

La carta
 
Este es el texto de la carta, que fue publicada con un título fuerte: "Querido violador".  

"Loque menos soporta el ser humano es verse a sí mismo como una mala persona. Asíque cuando hace algo que lo podría acercar a esta definición, encuentra excusasmentalmente y, sobre todo, evitan ponerle palabras a sus actos. 'No, pero siella quería'; 'al final se lo pasó bien'; 'todas dicen que no al principio parano parecer unas guarras'; 'iba muy borracho'; 'me había estado calentando'; 'nopodía dejarme con el calentón'… y demás frases que, tal vez, te suenendramáticamente familiares.

Probablemente las hayas dicho o se las hayasescuchado decir a tus amigos y hayas reído sin considerarte un violador o sinser consciente de que estás alimentando esa cultura de la violación de la quetanto se habla.Puedesser un estudiante de Derecho o un drogadicto marginado, un padre de familia oun director de casting. Desde luego puede que no estés en la cárcel. La mayorparte de los violadores no lo están, porque la mayoría de las violacionessiguen sin denuncia. Un estudio de los 70, llamado 'El violador inadvertido' sesorprendía de lo 'normal' que podías parecer, y de lo distintos que son tusentornos. El estudio concluía que se pueden hacer muy pocas generalizaciones,así que podrías ser cualquiera de mis conocidos.


Datos tomados de Amnistía Internacional

¿Porqué lo haces? La mayoría de veces las no tienes ningún trastorno, ni siquieraun trauma. En realidad, lo haces porque crees que puedes. Porque te hanmentido: consciente o inconscientemente, te han educado para pensar que lamujer es inferior y te pertenece. La sociedad heteropatriarcal te ha hechocreer que tienes derecho a ejercer control y poder sobre ella. La cultura de laviolación te ha abrazado, la pornografía te ha animado.   

Estásroto, y has roto a alguien, pero haremos que ese alguien se vuelva a levantar,y que tú no puedas romper a nadie más. Porque por fin vamos a poner el acentoen ti y no en ellas. Porque el problema lo tienes tú y no la chica que hayatenido la desgracia de cruzarse en tu camino. En cada artículo y cada medio decomunicación se da el aséptico dato de que una mujer es violada en España cadaocho horas pero en realidad debería decirse que UN HOMBRE VIOLA A UNA MUJER EN ESPAÑA CADA OCHO HORAS, porque noson violadas por el Espíritu Santo ni por alguien abstracto, sino por un hombreque probablemente ni siquiera sea consciente de que está delinquiendo.

Asílas madres tendrán que dejar de decirles a sus hijas que tengan cuidado cuandosalgan de noche y los padres no les sugerirán que se pongan una falda menoscorta. En su lugar tendrán que decirles a sus hijos: 'Cariño, esta noche no teemborraches mucho, que puedes violar a alguien, o 'si ves que te entran ganasde violar a alguna chica, llámame y vengo a buscarte'… Porque dejaremos de hablar de las mujeres y de cómo tienen queprotegerse y estaremos centrados en ti y en cómo debes dejar de pensar que lamujer está ahí para satisfacerte, quiera o no".