En los últimos meses, el acoso racista y xenofóbico se ha intensificado en Estados Unidos. Se han dado incluso manifestaciones públicas en pro del racismo y la intolerancia, y ya son muchos los que denuncian estos abusos en las redes sociales.

El último ejemplo de esta lamentable oleada se dio en la Universidad de Transilvania, Kentucky, donde el estudiante Taylor Ragg hizo un post de Facebook que se hizo viral por las peores razones. Consistía de una captura de pantalla del perfil de su compañera de clases Paola García y el siguiente comentario “Todo el mundo vaya a reportar a esta ilegal en mi escuela que está presumiendo de estar violando la ley”.

El post se hizo viral rápidamente, repleto de comentarios llenos de odio e intolerancia hacia las minorías raciales de Estados Unidos. La publicación se difundió tanto que llegó a la misma Paola, quien en respuesta publicó un emotivo video de YouTube en el que comentó que “Los racistas están envalentonados y esta persona está incitando a acosarme, a que me denuncien”.

En un principio, Paola fue ignorada por la universidad cuando denunció el acoso de Taylor, con el pretexto de que no podían hacer nada, pero al ver la ola de presión y críticas que ejercieron otros estudiantes sobre la entidad, decidieron expulsarlo permanentemente.

Lo más probable es que de ahora en adelante Taylor lo piense dos veces antes de acosar otras personas, sobre todo en las redes sociales.