Estos rolls están compuestos por una base de masa esponjosa untada con mermelada de fresas. Por encima están cubiertos con un glaseado cremoso con sabor a vainilla. Esta receta de Averie Cooks puede hacerse con antelación. Así, podrás amasar por la noche, untar tus rolls por la mañana y disfrutar de ellos en el desayuno.

Ingredientes (rinden para 8 a 10 rolls)

Para la masa
- 1 huevo grande
- 2 1/4 tazas de harina común (tal vez necesites 1/4 de taza adicional, ver el paso 4)
- 3 cucharadas de azúcar
- 3 cucharadas de aceite vegetal
- 2 1/4 cucharadas de levadura instantánea
- Una pizca de sal
- 1/2 taza de leche (puede ser de vaca, de coco, de almendras o cualquier otra leche vegetal)

Para el relleno
- 2 tazas de mantequilla derretida
- Aproximadamente 3/4 de taza de mermelada de fresas o de fresas en conserva (también puedes usar duraznos, arándanos, moras, damascos, o cualquier otra fruta)

Para el glaseado
- Aproximadamente 1/3 de taza de queso para untar
- 1/3 de taza de azúcar
- 2 o 3 cucharadas de mantequilla bien blanda
- 1 cucharada de extracto de vainilla

Preparación

1. Para la masa, coloca todos los ingredientes en un recipiente grande, excepto la leche.

2. Mira las instrucciones del paquete para averiguar qué temperatura necesita la levadura instantánea. De acuerdo a esto, calienta la leche. Si no tienes un termómetro, fíjate que quede tibia, pero no extremadamente caliente.

3. Vierte la leche sobre los ingredientes secos y amasa con tus manos durante 10 minutos.

4. Si al cabo de cinco minutos la masa sigue estando muy pegajosa, agrega 1/4 de taza más de harina, de a una cucharada por vez. La masa estará lista cuando el bollo empiece a despegarse de los lados del recipiente. Ten cuidado de no agregar harina de más. La textura de la masa debe ser un poco pegajosa. Cuanta más harina agregues, menos esponjosos quedarán los panecillos.

5. Luego de amasar, coloca el bollo en un recipiente grande enmantecado. Tápalo y deja que leude en un sitio cálido donde no haya corrientes de aire. Deberá reposar por aproximadamente dos horas o hasta que duplique su tamaño.

6. Cuando el bollo haya duplicado su tamaño, presiónalo con tus puños. Luego, colócalo en una superficie enharinada y amásalo por tres minutos.

7. Con un rodillo de amasar, aplana el bollo hasta obtener un rectángulo de aproximadamente 45 x 30 cm.

8. Unta la mantequilla derretida sobre la masa.

9. Unta la mermelada sobre la masa, dejando un pequeño margen cerca de los bordes.

10. Enrolla la masa por uno de los lados largos del rectángulo. Formarás así un cilindro.

11. Divide el cilindro en 8 o 10 trozos de tamaños iguales. Puedes usar un cuchillo común para hacer esto, pero será más sencillo hacerlo con un trozo de hilo dental sin sabor. Si la mermelada se sale, intenta meterla nuevamente.

12. Acomoda los rolls en la bandeja que preparaste en el paso 6 y cúbrelos.

13. Coloca los rolls en un lugar cálido donde no haya corrientes de aire y espera hasta que dupliquen su tamaño. Esto tomará de 60 a 75 minutos. Luego, podrás hornearlos. Si no los quieres cocinar inmediatamente, puedes guardarlos en el refrigerador por hasta 18 horas. De todas formas, antes de cocinarlos, deberás dejar que crezcan.

14. Unos minutos antes de cocinarlos, precalienta el horno a 176°c. Hornea los rolls por 25 o 30 minutos o hasta que se vean ligeramente dorados.

15. Mientras se cocinan, prepara el glaseado. Para eso, mezcla todos los ingredientes en un recipiente pequeño y bátelos hasta obtener una preparación de textura suave.

16. Cuando los rolls estén cocidos, retíralos del horno y cúbrelos con el glaseado mientras están calientes. Sírvelos inmediatamente. Puedes guardarlos por hasta cuatro días. Antes de comerlos, caliéntalos unos segundos.