Las migrañas son intensos dolores de cabeza que pueden ir acompañados por síntomas tales como náuseas, vómitos o sensibilidad a la luz. Algunas personas también suelen sentir un dolor pulsátil sobre uno de los lados de la frente. Según explican en la enciclopedia médica Medline Plus, la mayoría de los expertos cree se ocasionan como consecuencia de la dilatación y constricción de los vasos sanguíneos de la cabeza.

Si padeces alguno de los síntomas descritos anteriormente o sientes dolores de cabeza frecuentes, deberías consultar con un profesional para averiguar a qué se deben. Aquí encontrarás algunas soluciones naturales para aliviar los malestares.

Cambios en la dieta

Según explican en el portal de salud WebMD, se ha comprobado que algunos alimentos pueden empeorar las migrañas. Entre ellos, se encuentran:

- El chocolate
- Los productos lácteos
- Los alimentos procesados
- Los alimentos que contienen tiramina: vino rojo, queso curado, pescado ahumado, higos y algunas legumbres.
- La cebolla
- El maní y otras nueces y semillas
- Las frutas cítricas
- La banana
- El aguacate

Lo mejor que puedes hacer para comprobar si hay algún alimento que empeora tus migrañas es llevar un diario. Anota allí lo que consumes junto con los días en los que experimentaste dolores de cabeza. Esto te permitirá determinar qué cambios necesitas hacer en tu dieta.

Aceites esenciales

Diluye algunas gotitas de aceite esencial de romero, melisa, manzanilla o lavanda en aceite de oliva. Moja tus dedos en esta preparación y aplícala sobre tus sienes con movimientos circulares. Hacer esto te ayudará a aliviar la tensión y el dolor de cabeza.

El aceite de menta también puede ser muy efectivo. Diluye algunas gotitas en alcohol e impregna un paño con la preparación. Úsalo para hacer compresas sobre las sienes afectadas.

Acupresión

Esta técnica de la medicina tradicional china consiste en presionar determinados puntos del cuerpo para beneficiar la salud.

1. Presiona el sitio ubicado entre el dedo pulgar y el dedo índice de una mano usando el pulgar y el índice de la otra mano, como se ve en la imagen. Haz esto durante un minuto o hasta que se vaya el dolor, siempre respirando profundamente. Repite con la otra mano.

2. Coloca tu pulgar o índice entre medio de tus cejas. Presiona hacia arriba durante un minuto mientras respiras profundamente.

3. Localiza el huequito que se encuentra en la base de tu cráneo, justo donde nace el cabello. Coloca tus pulgares a los lados de este sitio e inclina tu cabeza ligeramente hacia atrás. Presiona con tus pulgares hasta que el dolor desaparezca.

Poses de yoga

Como la migraña suele tener un origen tensional, el yoga puede ayudar a aliviar las molestias ocasionadas por ella. Estas son algunas poses que puedes probar:

1. Siéntate en una posición cómoda. Coloca tu mano izquierda sobre el lado derecho de tu cabeza. Suávemente inclina tu cabeza hacia la izquierda. Inhala y exhala algunas veces y cambia de lado. Repite este ejercicio algunas veces de cada lado.

2. Arrodíllate con las rodillas separadas. Eleva tus brazos y llévalos hacia adelante mientras acercas tu torso al suelo. Acerca tu mentón a tu pecho para estirar la parte de atrás del cuello. Si quieres, puedes apoyar tu frente sobre una almohadilla.

3. Esta pose consiste en hacer que tu cuerpo quede en la forma de una “V” invertida. Apoya tus talones y tus palmas completamente sobre el suelo y gira tus antebrazos hacia adentro para que queden enfrentados. Tus codos deben mantenerse bien derechos. Lleva tu mentón hacia tu pecho para estirar la parte de atrás del cuello. Para estirar toda tu columna, asegúrate de llevar el coxis hacia abajo.

3. Arrodílllate sobre el suelo de manera tal que tus pantorrillas queden paralelas entre sí y tus rodillas estén distanciadas de acuerdo al ancho de tu cadera. Entrelaza tus dedos detrás de ti, en la parte baja de tu espalda, y lleva tu torso hacia adelante hasta tocar el suelo con tu frente. Acompaña el movimiento con tus brazos. Acerca tus manos al piso tanto como puedas. Sentirás que se estira tu pecho, tus hombros y la parte de atrás de tu cuello.

4. Siéntate sobre tus talones, coloca tus manos 20 cm detrás de tus pies y arquea tu espalda y tu cabeza hacia atrás. Esta pose te ayudará a aliviar la tensión alojada en tu espalda, tu cuello y tu pecho.

5. Acuéstate boca arriba. Deja que tus pies se flexionen hacia los lados. Tus brazos deben quedar a 30° de tu torso, con las palmas de tus manos hacia arriba. Cierra los ojos y concéntrate en relajar todos los músculos de tu cuerpo.

Importante: Debe aclararse que La Bioguía no da consejos médicos ni receta el uso de técnicas como forma de tratamiento para problemas físicos o mentales sin el consejo de un médico, sea directa o indirectamente. En el caso de aplicar con ese fin alguna información de este sitio, La Bioguía no asume la responsabilidad de esos actos. La intención del sitio es solamente ofrecer información de naturaleza general para ayudar en la búsqueda de desarrollo y crecimiento personal.