La NASA ha emitido una advertencia: entre el 2 y 3 de noviembre la Tierra será azotada por una poderosa tormenta geomagnética que afectará principalmente a Estados Unidos, Canadá, Groenlandia e Islandia. Unos días antes, lo hará una más leve. Como toda tormenta de este tipo, podrán causar estragos en los satélites y las tecnologías relacionadas con la Tierra, como las transmisiones de radio y la energía eléctrica. 

La tormenta puede incluso causar apagones. El término “tormenta geomagnética” es la forma técnica con la que los expertos se refieren a lo que solemos llamar aurora boreal, las luces multicolores en el cielo. Estas tormentas son causadas por nuestro Sol, que despide miles de millones de partículas que alcanzan la Tierra en unos pocos días en la forma de vientos.

Por suerte, el campo magnético de nuestro planeta nos protege de sus efectos, pero las tormentas magnéticas pueden alterarlo, causando estragos que afectan nuestra tecnología. 

Ya el 24 y 25 de octubre se sintieron los efectos de dos tormentas menores y moderadas, respectivamente, pero los fenómenos de mayor intensidad se manifestarán los días 2 y 3 de noviembre. Como se mencionó anteriormente, estos eventos pueden afectar las comunicaciones y la energía eléctrica de las zonas afectadas.

Según el profesor Craig Rodger de la Universidad de Otago, somos vulnerables a estas tormentas porque “nos hemos vuelto cada vez más dependientes de la tecnología”.