A la mayoría nos gustan las papas, ¿verdad? Son muy sanas, nos dejan satisfechos y se pueden preparar de mil y un formas distintas. El australiano Andrew Flinders no era muy distinto a nosotros en ese sentido, hasta que decidió llevar su afición por las papas al siguiente nivel: comer únicamente papas durante un año entero.
 
Según informa The Independent, lo hizo no solo por ser un gran fanático de las papas, sino para demostrar que con una combinación de papas dulces y blancas su cuerpo podía recibir todos los nutrientes necesarios.

Aunque algunos están en desacuerdo e incluso lo llaman loco, nadie puede negar los resultados hasta ahora: perdió 50 kilos y su cuerpo está más saludable que nunca. La mayoría de los nutricionistas dirían que es una muy mala idea tener una dieta tan restringida, pero Andrew se informó con expertos y determinó que las papas ofrecen todo lo que su cuerpo requiere.

Según el nutricionista Rhiannon Lambert, las papas son “un todoterrenos nutricional”. Es sabido que las papas blancas tienen todos los aminoácidos que necesitas para que tu cuerpo produzca proteínas, repare células y combata enfermedades, pero comer solo papas blancas te llevaría a una deficiencia en el departamento de las vitaminas. Es ahí donde entran las papas dulces, que son ricas en vitamina A, E y C.

Además de contar con su dieta, Andrew pedaleaba una hora y media diaria en su bicicleta para añadirle algo de ejercicio físico a su vida, y parece que las cosas le han salido de maravilla. “Mi salud simplemente sigue mejorando. Tenía el colesterol alto pero ahora está bajo. Mi presión arterial bajó y mi azúcar en la sangré bajó. Cada vez que me hago una nueva prueba de sangre, se pone mejor y mejor”, confesó.

Esto no significa que todos debemos comer solo papas de ahora en adelante. Pero lo valorable es que, para tomar esta decisión drástica,  Andrew tomó una decisión controlada e informada con expertos, que todos debemos hacer antes de considerar un cambio importante en nuestra alimentación.