Los asuntos cotidianos absorben la mayor parte de tu tiempo, y prácticamente toda tu energía, por lo que luego resulta difícil invertirla en otras cosas que atraen tu interés pero es complicada hallar el momento para dedicarles tu atención, como el aprendizaje de un idioma o un instrumento musical, entre otras cosas.

Lo peor del caso es que a veces no tenemos tiempo suficiente ni siquiera para dormir bien, mucho menos para interese adicionales. Pero no desesperes, según la ciencia, hay 4 cosas que podemos aprender precisamente mientras dormimos, aprovechando cada segundo de nuestro día.

Un idioma

Una investigación consistió en el estudio de dos grupos de personas, mientras un grupo fue sometido a dormir mientras escuchaba audios que contenían conversaciones en inglés, el otro durmió normalmente. Al final se demostró que las personas que durmieron con los audios, tuvieron más facilidad de aprender lo que se les enseñó al día siguiente.

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Tocar instrumento musical

Otro estudio incitó a un grupo a apoyar el aprendizaje para tocar guitarra a través del videojuego “Guitar Hero”. La segunda fase consistió en dormir, y al despertar, las “clases” de guitarra habían surtido efecto, pues la melodía había sido memorizada.

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Recuerdos especiales

Otro estudio se basó en los recuerdos relevantes que almacenamos a lo largo de los años. Según la ciencia, calificamos nuestros recuerdos como importantes o menos importantes, y los separamos.

Los recuerdos más importantes son más difíciles de olvidar, mientras que los menos importantes desaparecen cuando la memoria se ‘actualiza’. Este estudio reveló que las personas se aferraban a las memorias que tuvieran algún tipo de sonido que nos recuerde esa vivencia en particular.

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Melodías

En el último estudio, de 2013, un grupo de personas fue analizado mediante dos rondas de siesta, pero antes, se les hizo oír una melodía. Luego de oír la melodía, un grupo durmió sin ningún tipo de interrupción, y como resultado no recordaron nada. Mientras tanto, al segundo grupo se le hizo escuchar la melodía inicial mientras descansaban, y el recuerdo persistía.

No estamos diciendo que deberías pasarte el día durmiendo para poder recordar algo que necesitas, pero es bien sabido que el sueño reparador puede reforzar conocimientos, algo útil cuando tratas de estudiar para un examen, aprender a tocar un instrumento o aprender un nuevo idioma.

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